En el minuto señalado un pase en profundidad de Rodrigo Da Costa puso a prueba la velocidad del capitalino Darío Suárez que le gana la posición a su marcador solo para encontrarse con la humanidad del portero del Sporting que sale a las tontas y locas fuera de su área produciendo una colisión violenta entre ambos jugadores que chocan sus cabezas y quedan tendidos en el suelo quedando el balón suelto para Marlon Santos que lo manda a guardar.
Gol, seguro… ¿o no?
Con ambos jugadores siendo atendidos la auxiliar de línea llama al central y tras una conversación deciden anular el gol por ¡una falta de Darío al arquero! En una decisión que provocó de inmediato la protesta del equipo de Tulsa y si técnico que vio la tarjeta amarilla por sus reclamos.
Inverosímil decisión en una jugada en la que el nuestro perdió varios dientes, debió abandonar el partido y el arquero, quien debió ser expulsado se quedó sobre la cancha.
Dramática despedida del partido para el cubano que estaba realizando un muy buen partido apuntalando su actuación con su noveno gol de la temporada, esta vez desde el punto penal para dar la ventaja transitoria a los suyos.
Por su parte Corrales, inicialista al igual que Suárez tuvo una noche muy ocupada tratando de contener a los rapidísimos extremos del Sporting que se mantuvieron rotando durante toda la noche y presionando sobre las bandas ocasionando todo tipo de problemas a la defensa del Tulsa.
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