Números y futbol.

Como ya habíamos anunciado hace unos días en nuestras redes sociales, ayer se confirmó la noticia del aplazamiento del Campeonato Nacional Apertura, si es que a un invento de 7 partidos (si se llega a esa cantidad) se le puede dar ese nombre.

 

Con el anuncio el torneo pasó a ser uno más al que se le aplicó la palabrita de moda de la AFC y el INDER en los últimos tiempos, si claro, esa misma: APLAZADO.

 

Y es que a pesar de haberse utilizado los presupuestos destinados para los mismo de manera “imprevista” comienzan a desaparecer las guaguas, la gasolina, la comida y todo lo que tenga que ver con el avituallamiento de los diferentes torneos con la impunidad que implica no tener a nadie que denuncie lo que se está haciendo mal pues la inmensa mayoría de los medios que se dedican al futbol nacional andan embelesados con las historias de los legionarios.

 

Finales pospuestas, no jugadas, campeonatos a los que se les devoraron rondas completas eliminándose más de 30 partidos, torneos fantasmas, en fin, un desbarajuste total en un mar de justificaciones que terminan donde siempre termina todo en Cuba en ese arte único de lavarse las manos y que nadie se atreva a investigar: Vino de arriba.

 

Y es que arriba es un término amplio todo poderoso inenvestigable, en fin, una puerta a un agujero negro donde se pierde todo incluido el dinero de la FIFA, que a pesar de las “auditorias” no encuentran ninguna irregularidad, claro es difícil encontrar cuando en realidad no se busca nada y solo se recogen papeles que aguantan lo que les pongan.

 

La asiduidad con la que han comenzado a desaparecer torneos y finales nos hizo investigar un poco y llegaron a nuestras manos algunas cosas interesantes como lo es la tabla que acompaña el artículo y en la cual se detalla cual debe ser el candelario del futbol nacional y cuánto dinero será destinado al mismo.

 

Dinero, claro que sale de las arcas de la AFC rumbo al INDER y aquí aparece un detalle interesante, mientras la AFC  paga al INDER en dólares este hace todas las transacciones en pesos cubanos o la moneda inventada en nuestro país que como es sabido no tienen cambio oficial y por tanto el dólar pasa libremente al INDER sí que claro, nadie pueda saber a ciencia cierta cuanto se gastó en realidad o cuanto se desvió y ahí vamos todos limpios, sin contra claro está el dinero que nunca se usó porque no se jugaron los partidos estipulados, una propina jugosa que algún día habría que investigar y determinar a donde fue a parar, porque al futbol, a la base, a los futbolistas no llega.

 

Una historia triste y lamentable que pareciera no importar a nadie y que por el bien de nuestro futbol habría que detener para que sea eso y no el futbol lo que se pare.