A raíz de la oficialización de la noticia que dábamos hace uno días sobre la convocatoria creo es importante dedicar un post al hombre al que debemos este acontecimiento.
Si bien en este vagón de la llegada de los legionarios se querrán montar muchos entre directivos, Crackeros y periodistas que ni siquiera conocen a los jugadores o la estructura del Campeonato Nacional pero atraídos por su deseo de protagonismo y “likes”, lo cierto es que el hecho de que hoy estén los legionarios en la selección se debe al trabajo y dedicación del estratega Pablo Elier Sánchez.
Hombre amable, respetuoso y querido por todos los que lo conocen, bueno alguno habrá por ahí que discrepe con nosotros en la valoración del pinareño o me acuse de chovinista, lo cierto es que si visión y trabajo fue el que ha hecho posible este momento histórico.
Pero lo cierto es que mientras los que hoy tratan de buscar protagonismo montaban campañitas mediáticas para sacar al pinareño en favor de oscuros personajes por su calidad de extranjero, el pinareño trabajaba en post de mejorar la selección y cambiar la historia.
Mientras que los mandamás del fútbol miraban desde lejos para no comprometer sus puestesitos y su viajecito pacotillero, fue Pablo Elier quien contactó a los jugadores, fue quien peleo en el INDER y a pesar de los riesgos, ya sabemos lo que sucede en Cuba cuando se atreve uno a proponer cambios, logró salirse con la suya y traer a los cuatro legionarios que en unos días vestirán la camiseta nacional, tal vez no todos los que quería pero al menos logró patear la puerta que siempre los dejaba fuera y abrir un rayo de esperanza.
Igual sería imperdonable y poco honesto no hablar de la importancia del trabajo y el aporte del periodista camagueyano, ex jugador y Capitán de selecciones cubanas juveniles: Osmany Torres.
Fue el conductor y guionista de FutbolxDentro, no solo por ser el primero en hablar abiertamente del tema en televisión nacional, si no también el que sirvió de lazo de conexión y comunicación entre los los jugadores en el extranjero interesados en jugar con la selección y la Federación, cuando aún los muchachones de hoy no soñaban aún con el internet.
No olvidar tampoco a Triana, sus peleas y luchas, su intento infructuoso por traer a Carlos Vázquez a la selección Sub 20 del 2018 entre otras tantas batallas y aquellos peridistas honestos y comprometidos con la causa que pusieron su granito de arena para cambiar la historia.
Eso se llama "Honor a quien honor merece"
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