Por Sandy Mederos (Tomado de Cubalite) 
Decir que hay talento en el fútbol cubano es una obviedad tan clara 
como que una pelota es redonda o que una portería tiene forma de 
rectángulo. Varias generaciones de atletas han ido demostrando que, a 
pesar de las masivas tupiciones mentales y otra sarta de vicisitudes, 
sobre la cancha se saben hacer las cosas, más todavía si fuera de ella 
hay alguien que le da sentido a todo.
Hace bien poco, una docena de los más prometedores futbolistas de 
Cuba, pertenecientes a la categoría sub-20, decidieron decir adiós –de 
momento- a su sueño de seguir defendiendo los colores de la escuadra 
nacional. Las perennes y crecientes dificultades, además del legado de 
sueños rotos de sus predecesores, terminaron por convencer a estos 
chicos de trazar su ruta al éxito fuera de casa.
Lo peor es que tal suceso no resulta para nada ajeno a lo que 
conocemos. Tiempo antes, unos cuantos mundialistas de Turquía 2013 ya 
habían optado por esa vía, mientras otros de sus compañeros 
sencillamente decidieron apartarse del balompié, desilusionados del 
tratamiento injusto y la falta de oportunidades que les golpearon 
directamente. Responsabilidad de ello tiene la Asociación de Fútbol 
Cubano… y algunas instituciones más.
Tampoco vamos, ahora, a presentar las cosas demasiado grises, porque 
no lo son. Hay esperanza para aquellos que intentan buscarla, y si a 
usted le quedan dudas, le aconsejo darse una vuelta por el sureño estado
 norteamericano de Florida y preguntar por un grupo de muchachos que han
 tenido, curiosamente, la suerte de encontrar su camino futbolero con el
 club Fortuna Soccer Club, establecido en la ciudad de Miami hace cuatro
 años.
Los protagonistas de este relato están acompañados desde la banda por
 sus mentores: el fundador Mario Lara y el coach Miguel Tito. Cada noche
 de viernes sobre el césped del Kendall Soccer Park, esta tropa de 
entusiastas persigue las mismas metas que otros se trazaron no hace 
tanto: las canchas estadounidenses, en donde varios estelares como el 
volante Osvaldo Alonso (Seattle Sounders), y el defensor Jorge Luis 
Corrales (Chicago Fire) han conseguido establecerse en la máxima 
categoría.
Arturo Diz Pé (ahora en el Portland Timbers 2) y Corrales pasaron en 
su momento por la “afortunada” disciplina de los miamenses, al igual que
 hicieran compañeros suyos que hoy se desempeñan en clubes de diferentes
 divisiones, entre ellos, Ariel Martínez y Darío Suarez (FC Miami), 
Yendry Torres y Brian Rosales (Tulsa Roughnecks) y Héctor Morales (Ann 
Arbor), por mencionar unos pocos.
Las aventuras de estos muchachos aparecen narradas en su mayoría en el blog de Fútbol Cubano,
 administrado por Mario, un hombre que ama como pocos la camiseta de las
 cuatro letras. Él mismo, desde su portal, ha fustigado y defendido a la
 selección de la Mayor de Antillas, sin dudar ni un momento en exponer 
las muchas falencias y desatinos de los administrativos del Inder y la 
AFC a la hora de organizar, aprovechar el potencial y motivar a los 
deportistas que defienden a día de hoy el nombre de los llamados Leones 
del Caribe.
Antes de seguir, habría que explicar lo que significa el Fortuna. 
Para ello basta con desentrañar los símbolos de su escudo con forma 
elíptica. En lo más alto, a la izquierda, y como señal permanente de los
 orígenes de sus miembros, está el archipiélago cubano. A su derecha, 
también en la parte superior, pueden verse unas estrellas que 
representan a los futbolistas nacidos en la isla que se encuentran 
esparcidos por el planeta. Al dividir las partes superior e inferior, 
puede verse una franja en donde reza: “Miami Est. 2014”, lógica 
referencia a la ciudad y la fecha de creación de la institución. Debajo,
 en primerísimo plano, aparece una “F” de estilo gótico, clara 
reminiscencia al original club Fortuna Foot Ball Club, primero de Cuba 
en realizar una gira internacional, cuando viajó a Costa Rica en el año 
1926. En el fondo, adornado por un balón de fútbol, todo es verde, color
 que indica la esperanza de un futuro mejor. Por último, e indicando la 
unidad del conjunto, un anillo de oro rodea la imagen elíptica.
Los orígenes del Fortuna yacen en la idea de crear una 
selección de cubanos que participara en la Copa Latina, torneo en donde 
participaban combinados en representación de todas las comunidades de 
emigrantes que viven en esa urbe floridana. Según cuenta Mario, y 
contrario a lo que pudiéramos pensar, el nivel era muy alto, pues 
aquellos onces que tenían dinero suficiente traían, incluso, a jugadores
 que formaban parte de las escuadras nacionales absolutas de su nación.
Sin embargo, un golpe de suerte –no se sabe si buena o mala–, hizo 
que los patrocinadores de la Latina se desvincularan y, por tanto, el 
evento desapareció. Los chicos, “enfermos” incurables de fútbol, le 
pidieron a Lara que tomara las riendas. Él, cuya función hasta ese 
momento había sido exclusivamente de promoción para el club, aceptó. El 
primer revés vino cuando intentaron incluirse en la Liga de Kendall, 
cuyo precio de inscripción resultaba excesivo de acuerdo a las 
posibilidades del grupo. La alegría volvió pronto a sus rostros, cuando 
los organizadores del torneo les llamaron para sustituir al combinado 
que iba último.
Aún sin uniformes, debieron alquilar unos a la Liga. El debut sería 
ante el monarca del Torneo Nivelación, el Uruguay Kendall. Sorpresa fue 
cuando el Fortuna se plantó más bien que lo esperado y consiguió un 
valioso empate a dos goles. Yosvani Conde, quien más tarde sería el 
capitán fundador, hizo el gol número uno del Fortuna en una competición 
oficial, si es que puede decirse así. Junto a él estaban otros como 
Reynier Cordova (Harry), Juan Lorenzo, Alex Ramírez, Andy Ramos y 
Alejandro Hernández, grupo que todavía forma parte del equipo de la gran
 “F”.
Las sonrisas se siguieron acumulando, al punto de que Mario Lara y 
sus discípulos rozaron la clasificación a play off, de los que se vieron
 privados por un revés en la jornada de cierre. Durante esa temporada 
inicial, Anderson Padrón, amigo personal de Mario y encargado 
del club Union USA, se convirtió en un aliado importante. Desde 
entonces, Union y Fortuna comenzaron a intercambiar jugadores, una 
tradición que se mantiene hasta nuestros días como muestra de la 
hermandad entre cubanos más allá de las fronteras de la Isla.
Al año siguiente, Lara y su tropa levantaron por fin un título. Los 
recuerdos de aquel Torneo de Segunda División no se irán de su memoria 
nunca, sobre todo la noche del choque semifinal ante Miami Sounders, 
partido que Mario califica como el más tenso de su breve historia. Con 
un jugador de menos durante buena parte del enfrentamiento, luego de la 
roja que recibiera su portero titular, les pitan un penal en contra. 
Conde asume el reto, se pone los guantes y detiene el disparo. Luego 
llegarían más penales, esta vez en forma de tanda definitiva. Empatados a
 dos, la suerte parece fallar: Fortuna falla la tercera oportunidad y 
acto seguido Yosvani se lesiona. Tony Núñez se viste de héroe para la 
ocasión, y detiene par de tiros desde los doce pasos. En lo adelante 
anotarían otro par de penales y cerrarían por todo lo alto su pase a la 
gran final, en donde luego vencerían cuatro goles a uno.
Comenzaría entonces una época de dominio fortunense, racha marcada 
por el arribo a tres finales consecutivas, aunque empañada por igual 
cantidad de derrotas. No fue hasta el cuarto intento que llegó la 
redención: el triunfo ante Real Miami, uno de los tres anteriores. En 
2018 vuelven a alzar otra copa frente al Doral, todo un histórico de las
 lides miamenses.
En 2016 fue noticia el ascenso de un cuarteto de futbolistas al Fort 
Lauderdale Strikers, en su rama para menores de 20 años. Ellos fueron 
Jonathan Moliner, Jarni Prieto y Modesto Méndez, quienes llegaron a ser 
titulares, además de Ulises Serice, quien acumuló unos cuantos minutos 
de juego.
Esa misma temporada hubo un tope con el Strikers de mayores, equipo 
perteneciente a la North American Soccer League (NASL, equivalente de la
 segunda división), en donde estaba incluido nada menos que Amauri, 
delatero italo-brasileño que jugara en la Serie A con Juventus, Parma, 
Fiorentina, Palermo, Napoli, y que actualmente milita en el New York 
Cosmos.
A lo largo de este tiempo, el equipo ha contado con el honor 
de tener entre sus filas al máximo goleador de la Liga en cinco 
ocasiones. Los “matadores” que han logrado tal hazaña son Johan Panfet, 
Darío Suárez, Frank López (dos veces) y Liván Vasconcelos. Por si fuera 
poco, si en la puerta contraria han tenido éxito, defendiendo el arco 
propio sus representantes también han hecho méritos para ser elegidos en
 varios ocasiones como los más destacados. Dariel Cordero, Reybis Chinea
 y Andy Ramos conforman el trío de porteros que se ha llevado el 
galardón.
De lo que se trata el proyecto que conducen Lara y Tito, más allá de 
goles y victorias, es de servir a modo de cantera, y posteriormente de 
trampolín, para el ascenso de esas figuras a categorías superiores. Los 
jugadores ni siquiera cobran por jugar, sino que su “Champions League” 
particular consiste en ganar y llevarse a casa un cheque –suma de los 
aportes de entrada que hace cada equipo a principio de temporada– que 
les permita costear los gastos de botines, camisetas y otros útiles 
deportivos. La intención es mantener rodando la pelota el tiempo 
suficiente como para que un ojeador venga y se fije en ellos. Mientras 
tanto, ellos se divierten como hermanos.
Jugadores que han vestido los colores del Fortuna SC, y que ya han transitado por categorías profesionales o semiprofesionales:
Jorge Luis Corrales (Chicago Fire, Miami FC, Fort Lauderdale Strikers)Frank López (LA Galaxy 2) – USL
Arturo Diz Pé (Portland Timbers 2)
Yendry Torres (Tulsa Roughnecks) – USL
Brian Rosales (Tulsa Roughnecks)
Héctor Morales (AFC Ann Arbor) – NPSL
Darío Suárez (AFC Ann Arbor) – NPSL, Miami FC – NPSL
Eusebio Ruiz – Boca Ratón FC – NPSL
https://www.cubalite.com/fortuna-sc-la-casa-del-futbol-cubano-en-la-florida/

 
Me consta la sabiduría,amor,dedicación y constancia de Miguel Tito,profesor de muchos buenos jugadores en la década de los 80's y los 90's.
ResponderBorrarHola Mario
ResponderBorrarYa he guardado el artículo, porque es de los que hay que guardar en los archivos. Quería hacerte una pregunta. Siempre hablamos de nuestros jugadores, los nacidos en Cuba, pero poco sabemos de los que tienen raíces cubanas y gracias a tus videos conocemos a algunos. Esos jugadores ¿Pueden representar a Cuba o al nacer y residir en USA por las leyes norteamericanas respecto a Cuba no les es posible?. Gracias de antemano amigo. Saludos
Saludos, de los muchachos del Fortuna todos podrían ser convocados, al haber nacido en Cuba tienen el pasaporte cubano, más allá de que se hayan nacionalizado estadounidenses, la cuestión es saber si Cuba convocaría a los jugadores del Fortuna de Mario Lara 😂😂😂, viven con ese dolor entre pecho y espalda que tienen el Blog en Marcado Rápido para dejar sus opiniones prepotentes o armar chanchullos .
BorrarEn el caso de los nacidos aquí, o fuera de Cuba, habría que ver si los padres aceptarían solicitar su ciudadanía cubana con todos los problemas que esto puede acarrearle al muchacho.
En lo personal pienso que si les cuesta traer a los nacidos en Cuba para los que no lo hicieron en estos momentos es imposible.