De la mano de Luis Javier Paradela y sin excesos los Elegibles golearon 4-0 a una selección de St Kitts & Nevis, que demostró el por qué estuvo en el nivel C de la Liga de Naciones.
Con varios cambios, alguno de ellos sorpresivos, Nombre de Jeva arrancó el partido definitorio de los Play In después del papelazo en el partido de ida, en el que los Elegibles cayeron con marcador 1-2, obligando a los locales a ganar en el Maceo santiaguero.
Sorpresas generales las ausencias de Karel, Yuri (al que no le dio ni un solo minuto en los dos partidos), así como Rey Ángel y Maikel Reyes en la alineación hicieron llamativo un partido, en el que nadie dudaba que se le daría vuelta al resultado de la primera fecha.
Con más pasta que energía arrancó un partido en el que se antojaba un equipo local más agresivo en busca de hacer daño rápido al rival, sin embargo fueron estos los que pasearon la pelota por el sintético santiaguero en los primero compases del partido, eso sí, sin ideas claras o peligrosidad, algo que si empezó a mostrar el equipo del patio que sin mucha claridad en la media cancha, ni claro dominio, tocó la puerta visitante y se mostró como el equipo más peligroso.
En medio del soponcio de un partido que rondaba lo soporífero, apareció la visión de Paradela para de primera poner un balón en profundidad para Onel, que por primera vez en toda la tarde logró deshacerse de su marcador y ante la pasividad de la marca, y aprovechando el espacio abierto por matos definió cruzado y a la base de palo para adelantar a los Elegibles en el marcador e igual el global y despertarnos un poco.
El gol estimuló a los de casa que buscaron aprovechar el golpe psicológico al rival y se lanzaron a buscar el gol que le diera la vuelta, y ahí, justo antes de irse a los camerinos, Piedra en el centro del área chica, aprovechó un balón cedido por un Alejandro Delgado en fuera de lugar para martillar el 2-0 y asegurar el pase de los de casa.
Y decimos que aseguraba el pase pues por lo visto a esas alturas y el nivel mediocre mostrado por el rival, el pensar que pudieran marcar algún gol era algo de ciencia ficción, sin mencionar que las venias defensivas auguraban la posibilidad de más de un gol cubano, especialmente por la gran labor que hacia el tanden Paradela, Matos. Y fue esa la combinación ganadora, recuperación del matancero, que se la entrega al holguinero en el borde del área para que este levantara el balón devolviéndole el balón al Pelón, que solo frente al arquero, le dijo, guárdamela ahí hasta la próxima, sin dudas el mejor gol de la tarde.
De ahí en adelante se vieron los mejores minutos del local, que se perdió dos claras en los pies de Camejo y Casanova, el primero con el arco totalmente vacío, los cambios bajaron la intensidad, especialmente la salida de Paradela quien hasta ese momento había sido el hombre de las ideas sobre la cancha.
Un penal inocente en las postrimerías del partido permitió que, desde el punto de penal, Maykel Reyes le diera números finales al partido, un 4-0, claro pero no sólido, ante un rival de muy pobre nivel, y que por ninguna razón debió haber llegado a poner a los Elegibles en la obligación de ganar en casa.
En fin, como habíamos dicho en nuestro análisis del primer partido, aún faltaban 90 minutos. Victoria, clasificación y mucho por corregir las lagunas son muy grandes muy a pesar de que los que en la derrota ponían a arder a Troya y que hoy tras la victoria regresan a la infladera de globos. Castillo está de más, su equipo juega a nada, y lo de ayer es solo una curita para una herida mucho más profunda.
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