lunes, 2 de noviembre de 2020

Como bola por tronera.


Así salió el italiano Lorenzo Mambrini quien “disfrutó” muy poco tiempo al frente del seleccionado de Santiago de Cuba terminando así, al parecer, un culebrón que se inició tras su salida de los Tiburones avileños y regreso a Santiago de Cuba.

 

En tierra caliente, el italiano inició pronto sus acostumbradas maniobras de socavar autoridad y buscar alianzas con miembros del INDER y algunos jugadores fieles a él y a golpe de euros logró su cometido y ser nombrado al frente del conjunto santiaguero maniobra en la que prácticamente se destituyó en pleno al anterior cuerpo técnico de los Diablos.

 

Denuncias en algunos medios y reclamo del cuerpo técnico saliente que consideraron, con toda razón, injusta la medida, pusieron una pausa al nombramiento en busca de se que se calmaran las aguas y aparentar que los funcionarios del INDER involucrados en la jugada sucia parecieran investigaban y daban correcto curso a los reclamos.

 

Mismo que murieron hace apenas unos días atrás cuando el INDER tras mostrar un resumé del italiano que haría palidecer de envidia a los de Zidane o Guardiola nombraba al Mambrini como nuevo técnico del conjunto santiaguero consumando así el golpe de estado que se había fraguado con el aporte de algunos buenos ronazos y su euro pachanguero.

 

Sin embargo, aun faltaba un capitulo del mambrinesco culebrón, cuando el mismo italiano utilizaba sus redes sociales para anuncias que de “mutuo acuerdo” con el INDER Santiaguero dejaba la dirección de los Diablos, una declaración que como sucede cuando se trata del italiano no contaba la verdad.

 

Y es que según las “malas lenguas” que como todos sabemos en Cuba son las que cuentan las verdades la destitución de Mambrini llegó por orden expresa de la Habana acompañada además de un “no puede dirigir de nuevo en Cuba” algo que extraña sobre manera y hace preguntarnos que encontraron los chicos de la capital para soberana medida, acción que no podemos negarlo ha sido una de las más correctas tomadas por los directivos cubanos y que nos pone con ellos en la misma página.

 

Pero ¿será este el último capitulo de la novela Mambrini? ¿Será que por fin el futbol cubano se libre de este personajillo manipulador y arrogante? Habrá que ver, por lo pronto parece que se anda colando en los medios televisivos cubanos en donde seguro nos volverá a contar su Campeonato de Penalties o el tal vez el Campeonato que ganó en Panamá sin haber dirigido o jugado por allá, o a lo mejor como hizo para sacar a Santiago de la segunda categoría después de 102 años y sin ser el director técnico.

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