lunes, 11 de noviembre de 2019

Los seleccionados, así los vimos.

Rolando Abreu el jugador que más progreso ha mostrado bajo el nuevo mando de la selección nacional
Cuba lució mejor, lució como un equipo por fin después de tanto tiempo, con una idea clara de lo que quería, habrá quien hable del adversario para tratar de minimizar pero habrá que recordarles que hace poco no se perdía dos veces contra la Sub 23 de Honduras y se sufría contra Islas Cayman. Para no hablar de los pésimos resultados en las últimas visitas al país pilonero.

Una actuación que además debe tomarse con calma y no levantar falsas expectativas pero que habla del buen trabajo del técnico pinareño Pablo Elier Sánchez, hay que seguir trabajando con cabeza fría y pedir un mayor apoyo a la selección.

En lo individual así vimos a los seleccionados:

Sandy Sanchez: el tunero que ha recibido palos de parte de un sector de la afición por su actuación en las goleadas recibidas por la selección, mostró seguridad bajo los tres palos sacando varios disparos complicados.

Nelson Johnston: El santiaguero entró en la segunda parte y lució bien en la oportunidades en las que tuvo que entrar en acción

José Almelo: para mi de los mejores jugadores en la cancha, fuerte en la marca y mostró bastante seguridad aunque debe calmar un poco las emociones para evitar “regalarse” en algunas jugadas que con un equipo de mayor nivel pueden costar caro.

Sandro Cutiño: Sobrio y tranquilo lució bien en su primer partido como titular con la selección.

Erick Rizo: Buen trabajo del santiaguero, haciendo las coberturas y llegando a tiempo sin tener que lanzarse siempre al suelo como había sido su costumbre en los últimos partidos.

Dariel Morejon: Sigue teniendo problemas para las coberturas en el uno contra uno y es algo en lo que tendrá que trabajar muy fuerte si quiere mantener la titularidad cuando regrese Yosel Piedra.

Karel Espino: fuerte en la recuperación, necesita seguir trabajando en la entrega de balón que a veces le cuesta, fue el único que se atrevió a pegarle desde afuera.

Rolando Abreu: de los mejores del equipo, cambio total de este jugador, el famoso “quien lo vio, quien lo ve” de un jugador al que le rebotaban todos los balones y corría nervioso por la cancha a uno que sabe donde moverse, crear peligro, desequilibrar y ayudar a defender. Sin dudas al que mejor le ha venido la entrada de Pablo Elier al frente del equipo. Gran artífice del gol cubano.

Jose Pérez: Poco se vio del habanero y pasó casi intrascendente tal vez porque se utilizó más a Paradela y Abreu como referentes en el ataque. 

Jean Carlos Rodiguez: solo chispazos del pinareño pero no mucho más.

Luis Paradela: junto a Abreu y Almelo de los mejores, creo muchos problemas, de un taconazo suyo se originó el gol. Creo todo tipo de problemas a la defensa nicaragüense que se fue a casa con varias amarillas al usar fuerza desmedida para tratar de controlarlo, una muestra de lo que el fútbol profesional puede hacer mejorar a un jugador.

Maikel Reyes: el Gol y otro medio gol, abusó en ocasiones del individualismo o la gambeta sin conseguir ningún fruto, sin embargo el gol debió ser un alivio para el Fideo que ha estado muy lejos de su forma habitual desde su lesión.

Arichel Hernández: entró de cambio y lució más tranquilo, el hecho de que el equipo tuviese más el balón pareció hacerlo sentir más confortable, esperemos recupere su nivel y recuerde también los pases con el interior del pie pues tiende abusar mucho de los tres dedos. 

Randy Reve: sencillo, técnico sin complicarse, dinámico, me ha gustado mucho las veces que le he visto jugar y anoche no fue la excepción. 

Anibal Alavarez y Lázaro Monzon entraron a los 88 y 90 minutos, muy poco tiempo para valorar el trabajo de ambos

1 comentario:

  1. Excelente. Totalmente de acuerdo con lo que dices del fútbol profesional. Las dinámicas del deporte moderno no perdonan. La diferencia entre un futbolista amateur y uno profesional saltan a la vista. En mi opinión, es la única solución posible a los problemas (deportivos) de la selección cubana. El cien por ciento de la plantilla debe ser insertada en el fútbol profesional. De lo contrario, seguiremos dónde mismo.

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