El Villa suspendido por dos años.

Duro golpe recibieron hoy los Campeones Nacionales de Cuba: Santiago de Cuba cuando la Federación Cubana de Futbol dio a conocer que el delantero Jorge Villalón Revé fue suspendido por dos años debido a los incidentes del partido de ida de la Final del Futbol Cubano entre los santiagueros y el equipo de la Capital.

Villalón, quien terminó, con 14 dianas, como líder goleador del último nacional, había recibido ya una sanción de cinco partidos por los mencionados hechos, misma que según muchos afectó su llamado al seleccionado nacional, o al menos a la preselección de la tricolor un puesto que se ganó a base de goles.

No es sin embargo, el primer jugador en ser pasado por la piedra, por los Federativos cubanos quienes en más de una ocasión han aplicado la sanción de dos años a los atletas.

Estamos de acuerdo en que Villalón, al igual que otros jugadores ese día cometió una grave indisciplina, algo que critícamos duramente cuando se prodijeron los actos de indisciplina y que en ningún momento justificamos; y creo, el santiaguero sería el primero en estar de acuerdo con lo que planteamos, pero… ¿Cuan justo es suspender a un jugador por dos años? ¿Qué poder educativo tiene tamaña suspensión? ¿Se trata de enseñar al jugador o de destruirlo?

Para mi sin duda lo segundo, dos años alejado del deporte que se quiere, de los entrenamientos, de la convivencia con el equipo, de la lucha por ganar partidos, campeonatos con su equipo es demasiado castigo para cualquier atleta.

Pensamos que hay métodos más eficaces si quiere educar el jugador, que dejarlo por dos años sin jugar, claro que implicaría además que los directivos de nuestro futbol sirvan de ejemplo con sus actitudes y procederes algo que está muy lejos de lograrse.

Pensamos que la Comisión de Santiago de Cuba, debería elevar un reclamo a la Federación Cubana de Cuba y pedir una reducción de la sanción que hoy se le ha impuesto al Villa.

Todos en la vida cometemos errores, lo importante es aprender de ellos, tomar las lecciones que podamos de ellos para no repetirlos en el futuro, esperemos que se haga un llamado a la cordura, que prime la razón y Villalón regrese a los Diablos Rojos, tras cumplir una sanción sensata por los actos de indisciplina, que cometió.

Construir es mucho más difícil pero da más satisfacción, destruir es mucho más rápido, tan rápido que cualquier idiota puede hacerlo como acaban de demostrar los mandamás del futbol cubano.