Sin Mundial Cuba mira a los Panamericanos.

Tras la derrota de ayer frente a Honduras 1-3 la selección cubana vio esfumadas sus posibilidades de asistir a sus segundo Mundial Sub 20 por lo que ahora la mirada de los dirigidos por Triana es tratar de regresar a los Juegos Panamericanos.

La CONCACAF que usa este pre mundial además como clasificatoria para los Juegos de Lima 2019 entregará cuatro plazas, la primera el mejor equipo de Norteamérica, la segunda al mejor de Centroamérica, la tercera a la mejor selección del Caribe, mientras que para la cuarta aun no se anuncia cual es el criterio que se usará para definirla.

Una clasificación directa que ha sufrido un duro golpe tras el empate a dos goles entre los seleccionados de México y Jamaica, que coloca a los jamaiquinos en la cabeza de los conjuntos caribeños con 7 unidades y con partidos pendientes ante Aruba y Saint Martin equipos que no lucen, al menos en el papel, como conjuntos capaces de detener a los Reggae Boyz.

Con ese panorama sombrío y con la esperanza pendiente sólo de lo que sacará la CONCACAF de debajo de la manga los nuestros enfrentarán sus dos últimos partidos como el tercer mejor equipo caribeño, además de Jamaica con 7, por encima de los nuestros se encuentra Surinam con la misma cantidad de puntos que Cuba pero con +11 en la diferencia de goles, aunque el equipo de los Leopardos tendrá que verse frente a Trinidad (también con seis unidades y 0 de diferencia de goles) y Estados Unidos en sus últimos dos partidos.

Con Haití y Dominica con la misma cantidad de puntos que los cubanos y sobre todo con los Haitianos con la misma diferencia de goles que los nuestros es extremadamente importante, mañana, no solo ganar ante Antigua & Barbuda sino también marcar la mayor cantidad de goles posible, pues aunque se cierra contra Sint Maarten esta no está asociada a la FIFA y muy probablemente no se cuente este partido a la hora de contabilizar los puntos y goles a favor y en contra.

Así las cosas, a partir de las 5 y media los muchachos saldrán al ruedo en busca de mantener una llama de esperanza, para su futuro, viva.